La persistencia de una mujer, y los nuevos médicos, encontraron la verdadera fuente de su extraño dolor.
Su diagnóstico inusual fue seguido de una búsqueda larga y difícil de un tratamiento eficaz.
Los especialistas estaban desconcertados hasta que un cirujano descubrió el sorprendente vínculo entre su implacable picazón y un evento de una década.
Los especialistas trataron febrilmente de averiguar por qué el bebé de 5 meses dejó de respirar.
Un escáner cerebral provocó una reevaluación total del historial médico de esta mujer que se remonta a años atrás.
Una desafortunada combinación de suposiciones erróneas y oportunidades perdidas retrasó un diagnóstico común.
La sorprendente razón de sus arcadas llevó a un publicista de Los Ángeles a renovar su estilo de vida.
Una diseñadora de bolsos de Nueva York ha luchado para hacer frente a su confusa condición.
La apertura mental de un cirujano condujo a una solución exitosa que otros habían descartado.
La duración de su dolor ardiente, provocado por olores químicos, ha desconcertado a los médicos.
Después de tropezar con un perro y caerse, una radiografía planteó la posibilidad de cáncer. Entonces, ¿por qué había mejorado su dolor de cadera intratable?
Atrapada en el tráfico, descubrió imágenes en su teléfono que parecían coincidir con sus extraños síntomas.
Por qué múltiples drogas y tratamientos repetidos no lograron detener el alarmante deterioro de un maestro de Virginia.
Las preguntas contundentes de un especialista expusieron la prolongada incapacidad de diagnosticar y tratar al director de una escuela primaria por una enfermedad que podría haberlo matado.
Las regresiones desconcertantes de un niño pequeño presagiaron un diagnóstico devastador.
Su ansiedad dejó a algunos médicos escépticos ante un problema físico.
Un grupo de especialistas trató de ayudar, pero parecía obstaculizado por sus síntomas y su enfoque limitado.
Su caída de las gradas durante la graduación de la escuela secundaria provocó una búsqueda de respuestas.
Los médicos estaban perplejos. Luego, un especialista a 13.000 kilómetros de distancia ordenó un escaneo revelador.
Varias rondas de antibióticos y otras medidas no erradicaron la fuente inesperada.